THE MONUMENT VALLEY, ARIZONA, USA

THE MONUMENT VALLEY, ARIZONA, USA
La magnificencia del paisaje en The Monument Valley, la belleza del entorno, las reminiscencias de un pasado de tantos y tantos viajeros que cruzaron el Far West, protagonizando aventuras míticas entre las tribus indias y buscando un futuro mejor...Y al igual que esa ruta invita a seguir hasta más allá del horizonte, hasta el infinito, el Monument Valley, suscitando mil experiencias viajeras y recuerdos, se convierte en el icono de este blog que pretende rememorar las emociones y experiencias del conocimiento de nuevas tierras, nuevas culturas y nuevas gentes. Sin descartar que invada la nostalgia evocando vivencias personales de épocas ya pasadas pero nunca olvidadas.

miércoles, 27 de abril de 2011

LA PIEL DE TORO: OPORTO, LA JOYA DEL NORTE DE PORTUGAL

Oporto (en portugués, Porto) es la segunda ciudad más importante de Portugal después de Lisboa. Tiene 221.800 (2008 est.) habitantes, además de Vila Nova de Gaia, que forma parte de su área metropolitana; cuenta con casi 2.000.000 en su Área Metropolitana. Contornan el núcleo central de la ciudad de Oporto la subregión de Gran Oporto y de manera más amplia el Área Metropolitana de Oporto. Se encuentra en el norte del país, en la ribera derecha del Duero en su desembocadura en el océano Atlántico. Es sede del Distrito de Oporto, en la Región Norte de Portugal.
El municipio de Oporto tiene 15 freguesías (equivalentes a parroquias o barrios). Limita al norte con Matosinhos y Maia, al este con Gondomar, al sur con el río Duero y Vila Nova de Gaia, y al oeste con el Atlántico.
Como muchas ciudades europeas, Oporto es una ciudad antigua que cuenta con un amplio patrimonio histórico, aunque durante las últimas décadas ha sido sometida a una amplia modernización. Cuenta con el metro más largo de Portugal que cubre no sólo el Centro, sino también zonas de su área metropolitana como Senhora da Hora o Maia. Asimismo, el aeropuerto internacional Sá Carneiro ha sido recientemente ampliado hasta alcanzar una capacidad de 16 millones de pasajeros anuales.
Desde muy antiguo hay una pugna entre Lisboa y Oporto. Dicen que esta ciudad tiene un cierto aire británico, desde que se asentaron aquí los comerciantes de vino ingleses. Se dice que Lisboa gasta, Coimbra estudia, Braga reza y Oporto trabaja.
Su centro histórico ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Otros atractivos turístico-culturales son la Torre de los Clérigos, realizada por Nicolau Nasoni, la Casa de la Música y la Fundación Serralves dedicada al arte contemporáneo, y que es el museo más visitado de Portugal. En el margen sur del río Duero se encuentran las famosas bodegas de vinos aunque de ese margen del río ya no es Oporto sino Vilanova de Gaia. Dista de la frontera española (Galicia) unos 140 km que pueden recorrerse por autopista.
Tanto el país como el vino de Oporto (Vinho do Porto), u Oporto a secas, deben sus nombres a la ciudad de Oporto, que a su vez significa "puerto". Por su pujanza cultural, demográfica e industrial es considerada como la "Capital del Norte" portugués.
Historia
La leyenda cuenta que Cale era el nombre de uno de los argonautas griegos que llegó hasta aquí en un viaje que hizo y fundó un enclave comercial.
Se sabe que Cale era un pequeño asentamiento que ya conocían los griegos situado en la orilla izquierda del Duero, cerca de su desembocadura; tenía muy malas condiciones para la navegación por lo que los romanos trasladaron la ciudad a un lugar de mejores condiciones donde se pudiera construir un puerto. Durante las invasiones bárbaras, Cale pasaría a control suevo.
El Duero y los barcos rabelos
Hacia el 417 los alanos invadieron el territorio de los suevos, empujándolos hasta la orilla derecha del Duero donde hoy se sitúa Oporto. Los alanos, sin embargo, no llegarían a conquistar la villa. Hermerico I, el rey suevo, fortificó un castillo en la colina de Pena Ventosa, construyendo en su interior viviendas para las tropas. A este burgo se le llamó Cale Castrum Novum (castillo nuevo de Cale) adquiriendo la denominación de civitas. En la base de esa colina se situaba Portus Cale (puerto de Cale, actual Ribeira), que dio origen al nombre Portucale, que pasaría a designar también a la ciudad alta a partir de finales del siglo V. Otro castillo, situado en la orilla de Vila Nova de Gaia, quedó como defensa avanzada de Cale. Ambos castillos figuran desde hace siglos en el escudo de armas de Oporto, situados a los lados de la Virgen María, protectora del burgo desde siempre y razón por la que la ciudad también es conocida en Portugal como "ciudad de la Virgen".
Tras la invasión musulmana de la Península, Oporto fue reconquistada y poblada por el Reino de León al que perteneció hasta independizarse, dando lugar al Reino de Portugal. Dicho condado se extendía desde el Miño hasta el Duero. Alfonso VI otorgó este condado a su hija bastarda Teresa, casada con Enrique de Borgoña. El hijo de ambos fue el primer rey independiente de Portugal, Alfonso Henríques.
Monumentos y lugares de interés
El casco viejo está dentro de la lista del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco. Algunos de sus monumentos más importantes son el Palacio de la Bolsa, la Catedral, la Iglesia y Torre de los Clérigos, el Palacio Episcopal, el Ayuntamiento y sus puentes sobre el Duero
Ciudad de los puentes
Ponte D. Luiz
La ciudad de Oporto también es conocida por la imponencia, innovación y belleza de sus puentes, fechados en distintas épocas y de distintos estilos arquitectónicos.
Ponte das Barcas
El Ponte das Barcas fue el primer puente que se construyó sobre el Duero. La necesidad de establecer un paso hacia la margen sur del río para la circulación de personas y mercancías fue una preocupación permanente a lo largo de los siglos. La travesía del río se hacía con barcos, botes, barcazas etc. El Ponte das Barcas fue proyectado por Carlos Amarante e inaugurado el 15 de agosto de 1806. En su diseño original se componía de 20 barcas amarradas por cabos de acero que se podía abrir en dos partes para facilitar el tráfico fluvial.
Fue en ese puente donde ocurrió la catástrofe del Ponte das Barcas, en el que murieron miles de víctimas cuando huían, a través del puente, de las cargas de bayoneta de las tropas invasoras francesas del Mariscal Soult, el 29 de marzo de 1809.
Ponte Pênsil (Ponte D. Maria II)
El Ponte Pênsil era un puente sobre el Duero que unía la ciudad de Oporto con Gaia.
El aumento del tráfico entre Gaia y Oporto exigió la construcción de un puente para unir permanentemente ambas márgenes.
Ponte María Pía
Fue un proyecto de los ingenieros Mellet y Bigot. El Ponte Pênsil estaba constituido por dos obeliscos de 18 metros de altura, situados en cada margen del río. De ellos pendían los cabos de suspención del tablero, que tenía 6 metros de ancho. El vano central era de 150 metros. Ocho cabos, con 220 hilos de hierro cada uno, mantenían el tablero a 10 metros por encima del nivel de las aguas. El Ponte Pênsil abrió al público el 17 de febrero de 1843.
En cada extremidad se construyó una casa para los guardias que vigilaban el puente y cobraban el peaje: 5 reales por cada transeúnte, 20 reales por caballo y 40 por carro. Todos estos precios se duplicaban por la noche.
El Puente Pênsil fue desmantelado tras la construcción del del Ponte Luís I. Actualmente siguen en pie los dos pilares y restos de la casa del guarda en el lado de Oporto.
Ponte Maria Pia
El Ponte Maria Pia, así llamado en honor a María Pía de Saboya es una obra arquitectónica proyectada por el ingeniero Théophile Seyrig y construida entre enero de 1876 y el 4 de noviembre de 1877 por la empresa de Gustave Eiffel. Fue el primer puente ferroviario en unir las dos márgenes del río Duero.
En el último cuarto del siglo XX era evidente que el puente ya no respondía a las necesidades. Está dotado de una sola línea y sólo permitía ir a 20 km por hora, con cargas muy limitadas.
Se encuentra en desuso desde la apertura del puente São João, en 1991. Pese a la importancia arquitectónica de la obra, actualmente se encuentra en proceso de degradación debido al abandono causado por la falta de utilización práctica.
Ponte da Arrábida
El Ponte da Arrábida, proyectada por el ingeniero de puentes Edgar Cardoso, a la fecha de su construcción, en 1963, era el puente con el mayor arco de hormigón del mundo. Tiene 615m de largo, y una anchura de 27m. Es el más occidental de todos los puentes que conectan Oporto con Vila Nova de Gaia, estando a corta distancia de la foz del Rio Duero.
Ponte do Infante
El Ponte do Infante así llamado en honor de Enrique el Navegante, que nació en Oporto en el siglo XIV, es la de más reciente contrucción de los puentes entre Oporto y Vila Nova de Gaia. Sustituye el tablero superior del Ponde Dom Luiz I desde la construcción del Metro de Oporto.
Ponte Luiz I
El Palacio Episcopal y la Catedral
El Ponte Luiz I, sustituye el antiguo Ponte Pênsil, y fue proyectado por el ingeniero Teófilo Seyrig, el mismo que había ya proyectado el Ponte Maria Pia. Su característica más destacable, es el hecho de tener dos tableros. Actualmente por el tablero superior cruza la línea amarilla del Metro de Oporto, y el inferior está abierto al tráfico rodado.
Ponte do Freixo
Es el más oriental de los puentes que conectan la ciudad Oporto y la ciudad de Vila Nova de Gaia.
Economía
Las relaciones económicas de Oporto con el valle del Duero están bien documentadas desde la Edad Media. Nueces, frutos secos y aceite de oliva sustentaron un próspero comercio entre Oporto y la región. De Oporto, estos productos eran exportados a mercados del Viejo y Nuevo Mundo. Sin embargo, el gran impulso al desarrollo de las relaciones comerciales interregionales vino de la agroindustria del Vino de Oporto. Esta actividad marcó decididamente la relación de complementariedad entre el gran centro urbano del litoral y la región contigua de enorme potencial agrícola, particularmente consagrada a la producción de vinos fortificados de gran calidad.
El desarrollo económico de Oporto estuvo siempre íntimamente ligado a la margen sur del Duero, Vila Nova de Gaia, parte integrante de sus términos hasta 1834, donde se establecieron las cavas para el envejecimiento de los vinos finos del Alto Douro.
Oporto siempre rivalizó con Lisboa en poder económico. La clase rica de industriales de la región creó, a mediados del siglo XIX, la poderosa Asociación Industrial Portuense, hoy Asociación Empresarial de Portugal. La antigua Bolsa de Oporto se convirtió en la mayor Bolsa de Derivados de Portugal, al fusionarse con la Bolsa de Lisboa, creando la Bolsa de Valores de Lisboa y Oporto. En 2002, la BVLP (por sus siglas en portugués) acabó por integrarse a Euronext, junto con bolsas de Bélgica, Francia, Países Bajos y el Reino Unido. El edificio que albergó durante mucho tiempo la bolsa portuense, el Palacio de la Bolsa, sede de la Asociación Comercial de Oporto, es hoy una de las principales atracciones turísticas de la ciudad.
Oporto es sede del Jornal de Notícias, uno de los diarios de mayor tirada nacional, y de Porto Editora, una de las mayores empresas editoriales del país, conocida por sus diccionarios y libros escolares.
En Oporto convergen varias carreteras y líneas de ferrocarril, las cuales también contribuyeron en convertir a la ciudad en el principal centro comercial de toda la región norteña de Portugal. A pesar de la progresiva terciarización del centro, la actividad industrial continúa siendo de gran importancia, al laborar en su cinturón industrial fábricas de textiles, calzado, muebles, cerámica, metalurgia, orfebrería y otras actividades fabriles, algunas, además, artesanales.
Siendo la ciudad más importante de la altamente industrializada zona del litoral norte de Portugal, muchos de los más importantes grupos económicos del país de diversos sectores – tales como Altri, el grupo Amorim, el Banco BPI, Bial, EFACEC, Frulact, Lactogal, Millennium bcp, Porto Editora, Sonae, Unicer y RAR – tienen su sede en la ciudad de Oporto o en la Gran Área Metropolitana de Oporto.
Transporte urbano
El transporte público en la ciudad de Oporto se remonta al año de 1872, fecha en que la Compañía Carril Americano de Oporto fue pionera en iniciar su gestión en Portugal. Un año después fue creada la Compañía Carriles de Fierro de Oporto. La fusión de las dos empresas dio origen a la Sociedad de Transportes Colectivos de Oporto (STCP, en portugués), que tomó su actual designación en 1946. La STCP tiene a su cargo el manejo de los autobuses y el de las líneas tranviarias que subsistieron a la época dorada de estos transportes; hoy, algunos están en restauración en la parte baja de la ciudad. Hacia España, con destino a Vigo y Madrid, parten autobuses de ALSA.
Moderno tranvía o suburbano
La gestión de la red de metropolitano es efectuada por la empresa del Metro de Oporto. Esta posee en total 68 estaciones distribuidas por 60,0 km de líneas comerciales en vía doble, con 8 km de red subterránea, dispuestas por toda la metrópoli, lo que la convierte en la mayor red metropolitana de transporte público de masas en Portugal. El Funicular dos Guindais, operado por el Metro de Oporto, es un funicular que se encuentra en una escarpa y que conecta, de forma rápida, la zona del Batalha con la Avenida Gustavo Eiffel, en la ribera. La ciudad dispone, además, de una red ferroviaria suburbana manejada por Trenes de Portugal: líneas de Aveiro, Braga, Guimarães y Penafiel. También parten trenes de CP con destino a Vigo.
Transporte aéreo
El Aeropuerto Internacional Francisco Sá Carneiro / Pedras Rubras,Maia/Porto {OPO}, después de ser radicalmente reconstruido, rápidamente se convirtió en el segundo aeropuerto portugués con mayor tráfico aéreo, con una zona de influencia que se extiende por el noroeste de la Península Ibérica, siendo hoy un aeropuerto funcional de arquitectura contemporánea con capacidad para recibir hasta 16 millones de pasajeros por año.
Cultura
La ciudad de Oporto posee diversos espacios culturales de referencia en la región y a nivel nacional. Entre los diversos museos de la ciudad, destaca el Museo de Arte Contemporáneo, uno de los museos más visitados del país, donde también son expuestas obras de arte de varios artistas contemporáneos, al lado de la flora típica de la región norte de Portugal, en el envolvente Parque de Serralves.
La "Casa del Infante", que data del siglo XIII y lugar donde habría nacido el Infante de Sagres, es actualmente museo medieval de la ciudad y archivo distrital. Otras casas-museo incluyen la Casa-Museo Fernando de Castro, la Casa-Museo Guerra Junqueiro, la Casa-Museo Marta Ortigão Sampaio y la Casa-Taller António Carneiro.
Igreja do Carmo
Alojado en el edificio de la Alfândega Nova, el Museo de Transportes y Comunicaciones tiene como objetivo mostrar la historia de los transportes y medios de comunicación. El Museo del Carro Eléctrico, instalado en la antigua central termoeléctrica de Massarelos, dispone de una colección de coches eléctricos y remolques que circulaban por la ciudad. Anualmente, organiza un desfile de sus carros eléctricos por las calles de la ciudad, entre Massarelos y Passeio Alegre.
El Museo Nacional Soares dos Reis, creado en 1833 por D. Pedro IV, incluye gran parte de la obra del escultor. En Oporto existen diversos museos temáticos, de referir: el Museo del Vino de Oporto, el Museo de la Industria, el Museo de Historia Natural, el Museo del Papel Moneda, el Gabinete de Numismática, el Museo de Arte Sacro, el Museo de la Misericordia, el Museo Nacional de la Prensa, Diarios y Artes Gráficas, el Centro Portugués de Fotografía, el Museo Romántico de la Quinta da Macieirinha, el Museo Militar de Oporto y el Castillo do Queijo, célebre por su mirador, donde se realizan varias exposiciones temporales. Oporto alberga, además, las fundaciones de António de Almeida y de Maria Isabel Guerra Junqueiro y Luís Pinto de Mesquita Carvalho.
Barcos rabelos en la ribeira de Gaia
Los auditorios culturales de la ciudad son, en su gran mayoría, construcciones de los siglos XIX y XX. La construcción relevante de los últimos años es la Casa de la Música que es considerada la sala musical con mejor calidad acústica del mundo, y es una obra arquitectónica que fue concebida para el evento Oporto Capital de la Cultura 2001 (Oporto 2001), autoría de Rem Koolhaas y aclamada internacionalmente. El Teatro Rivoli, el Teatro Nacional São João y el Teatro Sá da Bandeira son importantes salas de espectáculos, de relevancia histórica y arquitectónica, localizados en el centro de la ciudad. Ahí se localizan, además, otros auditorios, como el Coliseo de Oporto y el Cine-Teatro Batalha, la más destacada e histórica sala de cine de la ciudad, a la que está relacionada la expresión local "vai no Batalha!". Otros teatros de mención son el Teatro do Campo Alegre y el Teatro Helena Sá e Costa, este último es palco de los talentos en formación de la Escuela de Música y Artes del Espectáculo de Oporto.
Gastronomía
Varios platos de la tradicional culinaria portuguesa tuvieron origen en la ciudad de Oporto.
Durante la preparación de la conquista de Ceuta en 1415, los ciudadanos de Oporto entregaron a los expedicionarios toda la carne disponible en la villa, quedándose sólo con las tripas. Desde entonces los portuenses reciben el apodo de "tripeiros", y es razón por la cual el plato tradicional por excelencia de la ciudad son las "tripas à moda do Porto" (tripas a la portuense) obligatorio en los mejores restaurantes.
El Bacalao a la Gómez de Sá es otro plato típico nacido en Oporto y popular en Portugal. La francesinha (francesita) es, de la culinaria reciente, el plato más famoso y consiste en un sándwich relleno de varias carnes, cubierto con queso y una salsa especial (molho de francesinha). La bebida que tiene el nombre de la ciudad es el vino de Oporto, el cual es producido en la región vitivinícola del Alto Douro y exportado internacionalmente desde las cavas que se situan en la margen izquierda del río Duero, en Vila Nova de Gaia.

Oporto, Ciudad del Futuro


Oporto es actualmente un próspero centro urbano, escenario de innumerables inversiones tanto nacionales, como internacionales. De los proyectos recientes, se puede citar la nueva terminal aérea, considerada por diversas entidades internacionales como la mejor de Europa; el Metro de Oporto, cuyo proyecto prevé casi 100 km de línea y 100 estaciones, que lo transformará en una de las mayores redes de metropolitano del mundo.
La Casa de la Música es también uno de los grandes proyectos de esta época, siendo por sí sola, un símbolo internacionalmente conocido por su arquitectura atrevida y moderna. Destaca también el Estadio del Dragón, casa del Fútbol Club de Oporto. El estadio ya ha estado varias veces en revistas internacionales de arquitectura, en las que ha sido enormemente elogiado. Otro punto donde Oporto ha crecido notablemente es en el turístico, paralelo a su oferta cultural.
Vistas inolvidables
A nivel cultural, Oporto cuenta con más de 10 mil eventos anuales, desde conciertos, pasando por teatros y exposiciones, hasta fiestas con disc-jockeys famosos en una de las muchas discotecas de la ciudad. Al cambiar de siglo, la evolución de la ciudad sufrió una explosión repentina, siendo hoy una ciudad con una vasta infraestructura en transporte público, red viaria, salud, cultura, turismo, entre otros factores fundamentales para la prosperidad de cualquier ciudad que se autodenomine como metrópoli Europea.
Otros asunto importante es la ampliación del Puerto de Leixões, el cual duplicará su posibilidad de carga y ofrecerá varios recorridos lujosos. Por último, es de referir dos grandes proyectos de reconversión urbana. El primero vista a la restauración total de las casas degradadas del centro histórico, en un megaproyecto valuado en 3 mil millones de euros. El segundo consiste en mejorar la calidad de las aguas de todas las playas de Oporto, con el objetivo de que sean distinguidas con Bandera Azul.
En suma, Oporto es una ciudad conocida mundialmente por el vino que lleva su nombre, su centro histórico, catalogado como Patrimonio Mundial por la UNESCO y también por su club de fútbol.

Torre dos Clérigos
El famoso vino
El vino de Oporto (portugués vinho do Porto), también conocido simplemente como oporto o Port, pertenece al género de vinos conocido como vinos fortificados. Estos vinos nacieron en los siglos XVI y XVII, como producto de la adición de brandy al vino cuando está en proceso de fermentación. De este modo se consigue la estabilización del vino, logrando un vino que resistía las variantes temperaturas y humedades del largo trayecto marítimo que el comercio de la época imponía.
El vino de Oporto se produce en los viñedos de la Región vitícola del Alto Duero, en Portugal. Antes del siglo XVII, esta región era ya conocida por sus vinos, tintos y blancos, aunque eran poco consumidos fuera de Portugal. En 1678, Inglaterra y Francia entran en guerra, ocasionando escasez de vino en el reino británico. Para hacer frente a la escasez, Inglaterra recurrió a los vinos de Portugal, su aliado de tres siglos. El vino del valle del Douro comenzó a hacerse popular en Gran Bretaña, más que nada por su ubicuidad en tiempos donde el vino francés era escaso o inexistente. Una versión sobre el origen del vino de Oporto como se conoce actualmente, dice que en 1678, comerciantes de Liverpool adoptaron una técnica utilizada en un monasterio en Lamego para modificar el vino. Esta técnica consiste en añadir brandy al vino durante la fermentación, interrumpiendo así el proceso de fermentado. El resultado es un vino con mayor contenido de alcohol (hasta 25 °G.L.), y con sabor más dulce, debido al azúcar remanente que no terminó de fermentarse.
Los Oportos se caracterizan por su gran intensidad aromática, la presencia del alcohol, su dulzura y la tanicidad en algunas de sus categorías.
El éxito de este tipo de vino en Gran Bretaña, llevó al establecimiento de varias casas vinícolas en Portugal, de origen británico. Para el siglo XVIII, había un monopolio británico de facto sobre la producción de oporto. Este monopolio duró hasta la fundación de la Companhia Velha, que marcó el ingreso de los portugueses a la producción y comercialización de este vino.
El oporto tinto se hace a partir de uvas Tinta Roriz, Tinta Barroca, Touriga y Tinta Cāo. El oporto blanco se obtiene de las uvas Malvasía Dourada, Malvasía Fina, Gouveio y Rabigato.
Tipos de vino de Oporto tinto
  • Retinto (full) – vino nuevo, con cuerpo, con acentuado sabor a fruto.
  • Tinto (red) – vino aun nuevo, tonos rojizos, vinoso, sabor y cuerpo semejantes al full.
  • Tinto dorado (ruby) – vino con (8 a 10) ocho a diez años de envejecimiento su color es Rubí.
  • Dorado (tawny) - vino con (15 a 20) quince a veinte años de envejecimiento, dorado, con tonos amarillos, ya pleno de cualidades, de lote y refrescado con otros vinos más jóvenes para darle frescura.
  • Dorado claro (light - tawny) – vino de gran categoría, en la fase final de envejecimiento, teniendo alcanzado el auge de sus cualidades. Sin embargo es un producto de varios cuidados, degenera si no es refrescado con vinos más jóvenes que permitan su existencia indefinida.
  • y dentro de estos puede ser muy dulce, dulce, semi seco, o extra seco. La dulzura del vino constituye una opción del fabricante, condicionada por el momento de interrupción de la fermentación.
El vino de Porto se puede tomar en copas tipo porto o tipo licor en las cantidades por dosis de 2 onzas; hay variadas clases, Vintage, Ruby, Tawny, o 10, 20 hasta 40 años, y se beben como aperitivos o como digestivos tanto para acompañar postres como quesos fuertes. Estos vinos  deben disfrutarse a temperatura ambiente y nunca enfriarse aun y cuando la temperatura sea excesiva, pues lo mejor es dejar en lugar fresco y siempre acostadas las botellas, porque estos vinos se conservan años siguiendo estas indicaciones.
(De Wikipedia y otras fuentes)
Oporto y sus alrededores son una de las muchas zonas inolvidables que he conocido en mi vida.
No solamente he visitado la ciudad muchas veces, sino que he tenido la inmensa suerte de vivir allí, teniendo casa, por más de diez años.
Pongo esto de manifiesto, porque la huella que ha quedado en mí de Porto y sus alrededores –como en general de todo Portugal— es indeleble.
(En otra ocasión me referiré a Lisboa, a Braga, a la zona del río Miño, a Évora, al interior en Guarda, etcétera)
Recuerdo aquellos deliciosos atardeceres en la terraza de mi casa de Vila Nova de Gaia, con todo el océano atlántico enfrente y cómo el sol, convertido en una bola de fuego con ribetes dorados, iba precipitándose hacia el horizonte, como si cayera a cámara lenta, mientras en la desembocadura del río Duero (a foz do Douro) lucían los plateados fulgores las gotas de agua en que las olas se descomponían al chocar con las rocas, todo ello con el sonido hasta armonioso de cientos, miles, de gaviotas.
Palacio de la Bolsa
Como asimismo siguen vivos en mi mente los mil sonidos que, ya en la noche, llegaban desde el océano, sublimados por el compás de las olas llegando a las playas.
Y cuando se bajaban las pendientes desde Gaia, en la zona del Canidelo, hasta el propio río Duero, para recorrer la ribeira izquierda, pasando por debajo del Ponte da Arrábida y llegar a las costeras en las que se hallan las caves do vinho do Porto, alcanzando el férreo Ponte Don Luiz I,  (con sus reminiscencias de Gustavo Eiffel) con sus dos tabuleiros, enfrentando la ribera opuesta, de la que llegaban mil olores de comidas y pescados emanados desde los pequeños restaurantes típicos allí encastrados entre las callejas.
Tranvía típico que llega hasta el mar
¿Y qué decir de la zona antigua de Oporto? La majestuosa plaza del Ayuntamiento, con la igreja do Carmo, nada lejana de la bella y azulejeada estaçao de Sao Bento, y a un tiro de piedra de la austera catedral gótica, con el Paço Episcopal casi adosado, para brindar un maravilloso mirador sobre las curvas, casi meandros, del aquí caudaloso río, en el que los barcos rabelos, cargados de toneles y con sus vistosos velámenes, rememoran los tiempos en que las vides se transportaban Duero abajo desde las zonas altas, alrededor de la ciudad de Regua.
Pasear por el Oporto antiguo, sobre sus adoquinados, inhalando ese olor a viejo que emanan sus calles y sus casas, confiere al espíritu una bonanza que de vez en cuando se exalta contemplando monumentos como la Torre dos Clérigos, o el Palacio de la Bolsa, y tantos y tantos otros.

Ayuntamiento 
en la Praça da Republica
No pretendo, ni mucho menos, hacer una narración exhaustiva de las maravillas de este Oporto que me acogió y de las buenas gentes con las que allí conviví, sino simplemente excitar el ánimo del amantes de los viajes para que profundicen en Internet sobre el tema y, si pueden, hagan una escapada para ver tanta belleza y recrearse comiendo unas tripas ao modo do Porto, o un peixe espada, o un filete de pescada, o unas moelhas (mollejas), o unos carapaus (jureles) sin olvidar los platos reyes, en mi opinión, las sardinas a la brasa y el cabrito al horno.

Y si aún se quiere gozar más, sentados frente al océano, la degustación sosegada de un buen vino de Oporto tinto traerá más paz de espíritu y un deleite de los sentidos que no se podrá olvidar.

Así al menos lo recuerdo, y así reactivo mis deseos de volver pronto a esta ciudad de los puentes y del Douro (Duero) que debe formar parte de la agenda de cualquier viajero que se precie.


"A minha cidade"

A minha cidade não se chama Lisboa,
não tem cheiro a sul
e nem por ela passa o Tejo,
mas como ela, tem Nascentes
leitosos e marmóreos...
Na minha cidade os Poentes são de ouro
sobre o Douro e o mar
e só ela tem a luz do entardecer
a enfeitar o granito...
Na minha cidade os Poentes são de ouro
sobre o Douro e o mar
e só ela tem a luz do entardecer
a enfeitar o granito...
Na minha cidade também há pregões,
gatos, pombas, castanhas assadas e iscas
e fado pelas vielas, pendurado com molas,
como roupa a secar nos arames...
A minha cidade tem também tardes languescentes,
coretos nas praças
velhos jogando cartas em mesas de jardim
e o revivalismo de viuvas e solteironas
passeando de eléctrico...
É bem verdade que na minha cidade
a luz, não é como a de Lisboa
mas a luz da minha cidade
é um frémito de amor do astro-rei
a beijá-la na fronte, cada manhã!...


...

Mi ciudad no se llama Lisboa,
no tiene olor a Sur
ni por ella pasa el Tajo,
pero como ella, tiene manantiales
lechosos y marmóreos…
En mi ciudad los Ponientes son de oro
sobre el Duero y el mar
y solamente ella tiene la luz del ocaso
para adornar el granito...
En mi ciudad, igual que en Lisboa
hay gaviotas y marea
pero no hay cacilleiros en el río,
hay rabelos
transportando néctar y almas…
De mi ciudad nace el Norte
acantilado, insumiso.
Y el sol, cuando llega, penétrala
delicadamente, cariñosamente
después de vencida la niebla…
En mi ciudad también hay pregones
gatos, palomas, castañas asadas y yescas
y  fado por las callejas, colgado con pinzas,
como ropa a secar en los alambres…
Mi ciudad tiene también tardes lánguidas,
coretos en las plazas,
viejos jugando en mesas de jardín
y el revivalismo de viudas y solteronas
paseando en tranvía…
Es bien verdad que en mi ciudad
la luz no es como la de Lisboa
pero la luz de mi ciudad
es un frémito de amor del astro rey
y la besa en la frente cada mañana!...

 (De MARIA MAMEDE, traducción al español del autor del blog)


SALVADOR DE PEDRO BUENDÍA