THE MONUMENT VALLEY, ARIZONA, USA

THE MONUMENT VALLEY, ARIZONA, USA
La magnificencia del paisaje en The Monument Valley, la belleza del entorno, las reminiscencias de un pasado de tantos y tantos viajeros que cruzaron el Far West, protagonizando aventuras míticas entre las tribus indias y buscando un futuro mejor...Y al igual que esa ruta invita a seguir hasta más allá del horizonte, hasta el infinito, el Monument Valley, suscitando mil experiencias viajeras y recuerdos, se convierte en el icono de este blog que pretende rememorar las emociones y experiencias del conocimiento de nuevas tierras, nuevas culturas y nuevas gentes. Sin descartar que invada la nostalgia evocando vivencias personales de épocas ya pasadas pero nunca olvidadas.

martes, 12 de junio de 2012

La piel de toro: Lisboa, antigua y señorial. Belleza y nostalgia a ritmo de fado

Lisboa es la capital y mayor ciudad de Portugal. Situada en la desembocadura del río Tajo (Tejo), aparte de la capital del país, es también la capital del distrito de Lisboa, de la región de Lisboa, del Área Metropolitana de Lisboa, y es también el principal centro de la subregión de la Gran Lisboa.
Toponimia
El nombre Olissipo, designación prerromana de Lisboa provendría de los fenicios. Según esta teoría, Olisipo derivaría de Allis Ubbo o puerto seguro en fenicio, debido a que era un magnífico puerto en el estuario del río Tajo, aunque no existe ningún registro que pueda corroborar tal teoría.
Etimología mitológica
Los griegos conocían Lisboa como Olissipo y "Olissipona", nombre que pensaban que derivaba de Ulises, que para los griegos era Odiseo, debido a que esta fue la ciudad que, según la mitología, fue fundada por Ulises en la península ibérica tras huir de Troya y antes de partir hacia el atlántico huyendo de la Coalición Griega
"Ibi oppidum Olisipone Ulixi conditum: ibi Tagus flumen."
Así lo recoge también Luís de Camões en Os Lusíadas (1572), la epopeya nacional de los portugueses. Más tarde, el nombre degeneró en el latín vulgar Olissipona.
Los árabes, que tomaron la ciudad en 719, la llamaron اليكسبونا (al-Lixbûnâ) o لشبونة (al-Ushbuna).
Clima
Lisboa es una de las capitales europeas más cálidas. Los meses de primavera y de estío son generalmente soleados, con temperaturas máximas en torno a los 28 °C durante julio y agosto, y mínimas de unos 16 °C. El otoño y el invierno son generalmente lluviosos y ventosos, con algunos días soleados.
Prehistoria
El poblado prerromano de Olisipo tiene su origen en los siglos VIII-VII a.C y se asentaba en la cima y en las laderas de la colina donde actualmente el castillo de San Jorge
Edad Antigua
Lisboa es para unos de origen griego, para otros fenicio. El puerto natural que creaba en estuario del río Tajo lo convirtió en el punto para crear un asentamiento que proveyera de comida a los barcos fenicios que se encontraban en ruta comercial hacia las islas del Estaño (actualmente Islas Sorlingas y Cornualles).
Los fenicios también aprovecharon la situación de la colonia en la boca del río más grande de la península ibérica para comerciar con las tribus del interior de las que obtenían metales preciosos. Otro importante producto local era la sal, el pescado salado y los caballos lusitanos.
Durante el reinado de César Augusto, los romanos construyeron un teatro y un anfiteatro; unas termas situadas en la actual Rua da Prata; Los templos de Júpiter, Diana, Cibeles, Tetis y Idae Phrygiae (un culto poco común procedente de Asia Menor), aparte de templos en honor al emperador; una necrópolis bajo la actual plaza de Figueira; un foro y otros edificios como las insulae, una zona de viviendas entre la actual colina del castillo y el centro de la ciudad. Económicamente Olissipo era conocida por su garum, una especie de salsa de pescado afrodisíaca que se exportaba hasta Roma y otras ciudades. Vino, sal y sus caballos eran otros elementos de exportación.
Torre de Belem
La ciudad estaba conectada por calzadas romanas a otras dos ciudades, Bracara Augusta en la provincia Tarraconense (actualmente la ciudad portuguesa de Braga) y Emerita Augusta, actualmente Mérida (España).
Olissipo sería uno de los primeros núcleos en abrazar el cristianismo. El primer obispo de la ciudad fue San Gens. Sufrió las invasiones bárbaras por parte de los alanos, los vándalos y posteriormente fue parte del reino de los suevos, antes de ser tomada por los visigodos del reino visigodo de Toledo, que la llamaron Ulishbona.
Edad Media
Lisboa fue tomada por los árabes aproximadamente en el 711 (recibió el nombre al-ʾIšbūnah en árabe الأشبونة), bajo cuyo gobierno la ciudad floreció. Los musulmanes, procedentes del norte de África y Oriente Próximo, construyeron varias mezquitas, casas y los muros de la ciudad, que actualmente se llama Cerca Moura. La ciudad mantuvo una población diversa entre la que se encontraban cristianos, bereberes, árabes, judíos y Saqalibas.
El árabe se impuso como idioma oficial. El mozárabe era la lengua materna que hablaba la población cristiana. El Islam era la religión oficial, practicada por los árabes y los muladís, los cristianos y judíos podían mantener sus creencias, en calidad de dhimmis, y previo pago del yizia.
La influencia musulmana todavía puede ser observada en el Alfama, la parte vieja de la ciudad que resistió al terremoto. Algunos nombres derivan del árabe; la Alfama, el distrito más antiguo de Lisboa, deriva del árabe al-hamma.
Fue tomada en 798 por Alfonso II de Asturias. En 844, los vikingos atacan Lisboa con 54 bajeles y la saquearon durante 13 días antes de ser expulsados. Hubo otra invasión vikinga en 966. Entre 1013 y 1022, durante el periodo Taifa, Lisboa perteneció a la Taifa de Badajoz, mientras se mantuvo bajo el poder de Sabur al-Saqlabi, un saqaliba, antiguo subdito de Alhakén II.
Un primer intento de los portugueses de tomar la ciudad fracasó en 1137. En 1147, como parte de la Reconquista, un grupo de caballeros franceses, ingleses, alemanes, y portugueses, liderados por Alfonso, asediaron y conquistaron Lisboa, pasando a manos cristianas.
La reconquista de Portugal y el restablecimiento del cristianismo es uno de los eventos más significativos de la historia lisboeta. El árabe perdió su estatus de oficialidad y poco a poco fue dejado de usarse en la vida cotidiana. La población musulmana que quedó se convirtió al Catolicismo o fueron expulsados, mientras que las mezquitas se transformaron en iglesias.
Lisboa recibió su primer fuero en 1179 y se convirtió en capital de Portugal en 1255 debido a su localización central en el territorio portugués.
Don Afonso Henriques
Entre 1383 y 1385 hubo una guerra civil (crisis de 1383-1385) en Portugal por la sucesión del último rey de la dinastía de Borgoña, Fernando I, entre los partidarios de doña Beatriz de Portugal, la esposa del rey Juan I de Castilla y los de Juan I de Avis. Lisboa, alineada con el bando de Avis, sufrió un asedio por parte del ejército castellano (que intervino en la crisis a favor de Beatriz), levantado por una epidemia de peste entre los sitiadores. Una segunda invasión terrestre fue derrotada en Aljubarrota en 1385.
En 1290, Dionisio I fundó el Estudo Geral (Estudio General) (actualmente Universidad de Coímbra), siendo trasladada varias veces a Coímbra donde se instaló de forma definitiva en el siglo XVI.
Edad Moderna
La mayoría de las expediciones portuguesas de la Era de los Descubrimientos partieron de Lisboa durante los siglos XV y XVII, incluyendo la salida de Vasco da Gama hacia la India en 1497. El siglo XVI supone la era de oro de Lisboa que se convirtió en un punto de comercio europeo con el lejano oriente, mientras que el oro de Brasil arribaba a la ciudad.
Tras la incorporación de Portugal a la Monarquía Hispánica de Felipe II (1580), se consideró incluso el establecimiento de la corte en Lisboa, pero se descartó, en beneficio de Madrid, donde se había fijado la capital en 1561. Los principales episodios de la revuelta de restauración de 1640, que obtuvo la independencia de Portugal, tuvieron lugar en Lisboa.
Al inicio del siglo XVIII, durante el reinado de D. João V, la ciudad es dotada con una gran obra pública extraordinaria para la época: el Acueducto de las Aguas Libres.
El Terremoto de Lisboa de 1755 mató a entre 60.000 y 100.000 personas. Después del terremoto de 1755, la ciudad fue reconstruida según los planes del Marqués de Pombal, por el cual a la parte central se le denomina Baixa Pombalina. En vez de reconstruir la ciudad medieval, el Marqués de Pombal decidió destruir lo que había resistido al terremoto y reconstruir la ciudad con normas urbanísticas de la época. La cuadrícula adoptada en los planos de reconstrucción permitió diseñar las plazas de Rossio y de Terreiro do Paço.
Edad Contemporánea
A principios del siglo XIX, Portugal fue invadido por las tropas de Napoleón Bonaparte, obligando al rey Juan VI a huir a Brasil. Las tropas napoleónicas fueron expulsadas por los ejércitos angloportugueses al mando de Arthur Wellesley, Duque de Wellington. Éste permitió a los ocupantes la evacuación de la ciudad, acordada en la Convención de Cintra.
La ciudad vivió intensamente la Guerra Civil y comenzó la época del florecimiento de las cafeterías y teatros. Más tarde, en 1879, fue abierta la Avenida da Liberdade que inició la expansión de la ciudad más allá de la Baixa.
Lisboa fue el centro de la Revolución del 5 de octubre de 1910, que instauró la Primera República Portuguesa. Previamente, había tenido lugar el regicidio de Carlos I en 1908.
Durante la Segunda Guerra Mundial, Lisboa fue uno de los pocos puertos atlánticos europeos neutrales, siendo una puerta de salida de refugiados.
En Lisboa tuvo lugar la Revolución de los Claveles que en 1974 puso fin al régimen dictatorial que se mantenía en el poder desde 1928.
En 1985, se produce la firma del Tratado de Adhesión a la Comunidad Económica Europea de Portugal y España, en el monasterio de los Jerónimos, en Lisboa.
Lisboa fue Capital Europea de la Cultura en 1994. La Expo '98 se celebró coincidiendo con la conmemoración del 500º aniversario del viaje a la India de Vasco da Gama. Este acontecimiento fue aprovechado para realizar una remodelación en la ciudad
Evolución demográfica
Actualmente, la población de Lisboa está a la baja aunque la del área metropolitana está en aumento debido a que la población se está trasladando del centro a la periferia o, incluso, a otras ciudades vecinas.
La población de la ciudad es de 564.477 según el censo de 2001, el área metropolitana cuenta con 2.641.006 habitantes en una extensión cercana a los 3.000 km², cerca de un tercio de la población de Portugal. La densidad de población de la ciudad es de 6.518,1 habitantes por km². El área metropolitana de Lisboa es una de las aglomeraciones urbanas en la Unión Europea que más rápido crecen, y se estima que su población aumentará hasta 4,5 millones de habitantes en 2050.
Como curiosidad añadir que los lisboetas reciben el apodo de alfacinhas, debido al intensivo cultivo de lechugas que hacían los antiguos habitantes de Lisboa en los campos cercanos a la capital.
En Lisboa se encuentran los principales centros políticos del país (ministerios, tribunales, etc.).
Dos agencias de la Unión Europea tienen sede en Lisboa; el Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías; y la Agencia Europea de Seguridad Marítima. La CPLP también tiene su sede en Lisboa.
Economía
Lisboa es la ciudad más rica de Portugal con un PIB per cápita superior a la media europea. El puerto de Lisboa compite con el de Bilbao como principal puerto de contenedores del "Arco Atlántico europeo"
Lisboa, como capital de Portugal tiene una economía concentrada en los servicios. La mayoría de las sedes de las multinacionales existentes en el país están situadas en Lisboa y además es la 9ª ciudad del mundo que más congresos celebra.
El Área Metropolitana de Lisboa está altamente industrializada, especialmente en los siguientes sectores: refinería de petróleo, industria textil, astilleros, siderurgia y pesca.
Transportes
Lisboa está conectada al otro margen del Tajo por dos puentes: el puente 25 de Abril, en la parte sur, inaugurado el 6 de agosto de 1966, que la une con la población de Almada, y el puente Vasco da Gama inaugurado en mayo de 1998, que conecta el nordeste de la capital (Sacavém) a la ciudad de Montijo. Lisboa se comunica con el exterior a través del Aeropuerto de Portela, el mayor de Portugal situado a 7 kilómetros del centro en la zona nordeste de la ciudad. El puerto de Lisboa es parada de numerosos cruceros y uno de los principales puertos turísticos europeos.
Lisboa y su área metropolitana están conectadas por varias autopistas. Existen dos autopistas circulares, la interior y la exterior. Las principales vías que conectan la ciduad con el resto del país son las autopistas A1 (hacia el norte vía Vila Franca de Xira, la A8 (hacia el norte vía Loures), la A5 (hacia el oeste vía Cascais), la A2 (hacia el sur vía Almada y la A12 (hacia el este vía Montijo).
Educación
Lisboa refundó su propia universidad en 1911 después de siglos de inactividad, reuniendo diversas escuelas y colegios universitarios preexistentes como la Escola Politécnica.
En esta ciudad hay tres universidades públicas; la Universidad de Lisboa, la Universidad Técnica de Lisboa y la Universidad Nueva de Lisboa. Entre los establecimiento privados se destacan la Universidad Católica Portuguesa y el ISCTE.
Arquitectura y urbanismo
Elementos destacados la arquitectura medieval en Lisboa son el Castillo de San Jorge, en la colina más alta del centro de la ciudad; el Barrio de la Alfama que sobrevivió al terremoto de Lisboa; la Catedral de Lisboa y el Convento do Carmo.
De la ciudad de la Era de los descubrimientos se pueden observar en la zona de Belém dos construcciones clasificadas por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad: el Monasterio de los Jerónimos de estilo manuelino y la Torre de Belém, construcción militar que vigilaba la entrada del Tajo. Antes se encontraba en el centro del río pero ahora está a un lado.
La Baixa es el corazón de la ciudad. Se encuentra sobre las ruinas de la antigua ciudad que destruyó el Terremoto de Lisboa de 1755. Su planificación urbana, de calles en cuadrícula y edificios similares se debe al Marqués de Pombal. La Baixa es también el mayor distrito comercial de Lisboa. En ella se encuentran la mayoría de monumentos, como el Teatro Nacional Doña María II, la Praça do Comércio y el Rossio.
También forman parte del núcleo histórico el Barrio Alto (distrito comercial, de entretenimiento y habitacional), y el Barrio de la Alfama, de estrechas calles (a diferencia del Bairro Alto, es una zona más tranquila). En este barrio se encuentra la Catedral así como el Castillo de San Jorge. Por último, en la ribera del Tajo, se ubica el Barrio de Belém. Allí se encuentra el Monasterio de los Jerónimos, cuya construcción comenzó en 1501 y se tardó 70 años en terminarlo. Es el mejor ejemplo de lo que se ha denominado estilo manuelino, cuya inspiración proviene de los territorios visitados durante la era de los Descubrimientos, estando también influido por el gótico y el estilo renacentista. Cerca del monasterio se encuentra la Torre de Belém.
De principios del siglo XVIII el monumento más significativo es el Acueducto de las Aguas Libres. Después del Terremoto, el plan urbanístico aprobado por el Marqués de Pombal creó las plazas de Comercio y Rossio. En las proximidades se encuentra la Praça dos Restauradores y el Elevador de Santa Justa, proyectado a finales del siglo XIX por Mesnier du Ponsard. El Teatro Nacional Doña María II es el principal teatro de la ciudad.
A finales del siglo XIX los planes urbanísticos permitieron extender la ciudad más allá de la Baixa, creándose la actual Avenida da Liberdade.
En términos de arquitectura, lo más notable de finales del siglo XX es el Parque das Nações y la Alta de Lisboa, todavía en construcción. Los edificios de finales del siglo XX más famosos son el Centro Cultural de Belém (inaugurado en 1991), el pavilhão de Portugal (de Álvaro Siza Vieira, la Estação do Oriente (de Santiago Calatrava), la Torre Vasco da Gama y el Oceanário de Lisboa (de Peter Chermayeff), todos de 1998.
En la parte occidental de la ciudad se encuentra el Palácio Nacional da Ajuda en la freguesía de Ajuda. También son destacables el Palacio de las Necesidades actual sede del Ministerio de Asuntos Exteriores portugués y el Palacio de Belém en la freguesía de Belém, que es la residencia oficial del Presidente de Portugal. Otras obras arquitectónicas mayores son la Biblioteca Nacional, y museos como el Museo Nacional de Arte Antigua, el Museo Calouste Gulbenkian, el Museo de Chiado, el Museo de la Farmacia y el Oceanário de Lisboa.
Música
La música tradicional de Lisboa es el fado, canción nostálgica acompañada de una guitarra portuguesa. La mayoría de locales de fado se encuentran en la Alfama, siendo generalmente restaurantes con música en vivo. Lisboa, como capital de Portugal es el centro musical del país, donde se producen la mayoría de discos de cantantes portugueses.
Gastronomía
Patanisca
La gastronomía de Lisboa está influenciada por su proximidad al mar. Especialidades típicamente lisboetas son las pataniscas de bacalhau y los peixinhos da horta (que son bolitas fritas de habichuelas verdes, no  pescado).
Se dice que los portugueses, y especialmente los lisboetas, tienen 365 maneras de preparar el bacalao, una receta diferente para cada día del año. Era popular en algunos cafés de tertulia durante la época bohemia unos filetes como el Bife à Marrare.
El postre más famoso de Lisboa es el Pastéis de Belém, elaborado en la fábrica más antigua, que se encuentra en la freguesía de Belém.

Soy de los muchos viajeros que adoran Portugal, y en este país, Lisboa, la capital, es uno de mis lugares preferidos, hasta el punto de que ni recuerdo las ocasiones en las que he visitado la ciudad del Tajo.
Y es que Lisboa tiene un “alma” especial, que seduce por la hospitalidad de sus gentes, la belleza de sus enclaves, el tipismo de sus barrios y esa mezcla de señorío dieciochesco y decimonónico y de luminosidad, en un entorno de pueblo llano y sencillo, que llega a embelesar.
Muchas son  las posibilidades que brinda una visita a Lisboa, y depende también de las pernoctaciones previstas, pero recomiendo iniciar el periplo lisboeta en la moderna Avenida da Liberdade, que nace en los altos de la Praça Marques de Pombal y se desliza hasta el Rossío, que es como la entrada a la plaza de Don Pedro IV y a las rectilíneas calles que desde ésta plaza conducen hasta el Terreiro do Paço, la gran plaza frente al río rodeada de edificios oficiales, ya lindando con la ribeira do Tejo.
Asomarse al Tajo desde el Terreiro permite una preciosa vista “a ras de río” y de la otra orilla, en la que destaca el Cristo en los altos de Almada y el puente 25 de abril, enorme obra de ingeniería, a lo lejos.
Desde esta zona es muy recomendable tomar el tranvía que cansinamente va subiendo junto a la Catedral () de Santo Antonio  para alcanzar las bellas vistas del Castelo de Sâo Jorge, fortaleza que domina buena parte de la urbe y que brinda unas preciosas panorámicas del Tajo.
Terreiro do Paço
El descenso desde el castillo bien merece un paseo (cuesta abajo, en definitiva) para contemplar pequeños restaurantes y tabernas y alguna que otra casa de fados, hasta retornar al Terreiro, en el que el tranvía puede permitir acercarse a la zona alta, pasando por el barrio de Alfama, llegando hasta el Carmo y bajando después a la zona del Monasterio de los Jerónimos, precioso monumento que es antesala de la Torre de Belem y del monumento junto al río llamado Padrâo dos Descobrimentos.
La visita de todo ello ocupa un buen tiempo y permite gozar de la brisa que siempre corre por el amplísimo estuario de río Tajo.
Llegado el tiempo del almuerzo, de los miles de restaurantes que hay en Lisboa, unos más típicos, otros más sofisticados, hay que aprovechar el extraordinario pescado, que se cocina de las mil y una maneras, desde el bacalao, la lubina, la dorada, el pez espada, los calamares (lulas, en portugués), el humilde jurel (carapau, en portugués) etcétera; sin olvidar las alternativas de buen marisco, pues son muy de apreciar los camarones de costa y las gambas. En cuanto a carnes, el pollo al carbón (llamado frango ao churrasco, especialidad heredada de Angola) es una posibilidad muy económica –y deliciosa— de degustar una carne extraordinaria y algo picante (con cayena o piri-piri), sin que pueda despreciarse la carne de cerdo, porque aunque éste alcanza cotas de exquisitez en la región portuguesa del Alemtejo, no es nada desdeñable su preparación en la capital, bien en forma de escalope empanado, bien a la cataplana (cazuela cerrada que semeja una almeja, con dos valvas, generalmente de bronce, que permite cocinar como si se tratara de una olla exprés moderna), porque la mezcla en ella de trozos de cerdo, almejas y verduras genera un plato delicioso.Otra especialidad es el cabrito al horno --más propia de otras regiones, sobre todo del norte--. aunque la ternera no suele ser demasiado buena en Portugal.
Los dulces típicos, de preparación casera, pueden completar una buena comida,especialmente el Napoleâo, a base de meregue bien regado, sin olvidar  las cremas.
Funicular
¡Ah! Y una curiosidad: En Lisboa son típicos los altramuces y los caracoles cocidos, que suelen tomarse con los aperitivos (debe de tratarse de una reminiscencia árabe, porque en las costas mediterráneas de España, principalmente en la región valenciana, se conservan esos gustos y hábitos culinarios)
Tras un buen almuerzo, que puede regarse con los magníficos vinos que brinda el país, blancos y tintos, y que en Portugal suele ser poco después del mediodía, es muy grato sentarse en cualquiera de las terrazas de la zona, para degustar el siempre buen café de Portugal.
Después de ello, es recomendable tomar el elevador de Santa Justa, que no es sino un ascensor en estructura de hierro tipo Eiffel, que conduce a la parte superior de barrio de Chiado, zona reconstruida casi totalmente después del pavoroso incendio que lo destruyó al final de los años ochenta del pasado siglo.
Y por la noche, ¡cómo no! hay que ir a una casa de fados, bien a cenar (aunque el yantar es caro y de calidad mediana), bien a escuchar además esas entrañables piezas musicales que distinguen la nación portuguesa y especialmente Lisboa.
Hay bastantes casas en el Barrio Alto y en Alfama en las que es posible disfrutar de esos cantos nostálgicos y dulces, que, envueltos en tipismo, desvelan bastante del alma portuguesa. No oculto mi nostalgia por los bellos momentos vividos en torno al fado
Por ello incluyo aquí un link o enlace a varios fados grabados en el popular barrio da Alfama. Deleitense. http://www.youtube.com/watch?feature=player_detailpage&v=3tii_PShOEY
Y coloco además un vídeo de fado cantado por la considerada como la más grande Fadista de todos los tiempos: Amalia Rodrigues
Una cosa puedo garantizar al visitante: Cuando deje Lisboa ya estará deseando regresar.
SALVADOR DE PEDRO BUENDÍA
Puente Vasco da Gama (18 kms.), inaugurado con motivo de la última Exposición Universal, que cruza el Tajo por el norte de la ciudad, en dirección al Alemtejo